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Contractura lumbar: Tratamiento con fisioterapia

La contractura lumbar es una de las patologías más comunes de la espalda cuyo dolor puede llegar a impedir cualquier tipo de actividad, por lo que se debe prestar especial atención a su tratamiento si queremos evitar que el dolor y sus síntomas se hagan crónicos.

Una de las zonas de la espalda que más tensiones soporta es la región lumbar. Las contracturas musculares, a causa de levantamiento de peso o de movimientos bruscos y rápidos de forma inapropiada, ocasionan dolores musculares así como posiciones mantenidas inadecuadas que hacen que la región lumbar se sobrecargue provocando dolor.

La contractura lumbar, también conocida como lumbago o lumbalgia, tiene por regla general una recuperación natural que ronda las dos semanas. Sin embargo, la recuperación puede dilatarse en el tiempo si el grado de la lesión muscular asociada de ligamentos de los propios discos invertebrales es más grave.En esta entrada te explicamos en qué consiste padecer una contractura lumbar, cuales son sus causas, síntomas y tratamientos.



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¿Qué es una contractura lumbar?

La contractura lumbar es una disfunción en las fibras musculares que, cuando se contraen, obstaculizan el flujo de oxígeno y nutrientes del riego sanguíneo a la vez que se produce una dificultad para hacer llegar sangre oxigenada y rica en nutrientes a estas fibras musculares a la vez que se acumulan productos de desecho que no se eliminan (patógenos y proteínas tóxicas)

Esta contractura lumbar viene acompañada de inflamación muscular y puede ser un dolor bastante agudo, que va a reducir la movilidad de la región lumbar y a alterar la sensibilidad de la zona.

Esta patología puede afectar tanto a personas que hacen un gran esfuerzo físico como a personas sedentarias, siendo más posible su aparición cuando se realizan posturas repetitivas, flexión brusca del tronco o sobrecargas de peso

La región lumbar tiene gran movilidad y resiste bastante peso gracias a los numerosos músculos que la sostienen. 

La aparición de dolor por una contractura lumbar es neurológico, ya que se debe a la activación de los nervios que transmiten esa sensación cuando se produce la contractura y la inflamación.  

¿Qué puede causar una contractura lumbar?

Son diversas las causas que pueden provocar la contractura lumbar.

  • Ejercicio físico

Bien sea por razones deportivas o laborales, sometemos a nuestro organismo a sobrecargas que van a provocar contracción muscular y con ello una disfunción que no nos permitirá continuar con la actividad. No usar las piernas y dejar que el peso recaiga directamente sobre la región lumbar provoca sobrecarga lumbar. En el aspecto deportivo, la ejecución de una técnica deficiente y el sobresfuerzo o los movimientos repetitivos es un factor de riesgo.

  • Higiene postural 

El hecho de no mantener un adecuado control postural va a suponer la tensión gratuita de la musculatura que causará la contractura, con la consiguiente inflamación, ejerciendo presión sobre los nervios que, además, transmiten dolor.

Ya sabemos que el control postural sirve para conservar una relación apropiada entre las diferentes partes del cuerpo a la hora de desarrollar un movimiento o actividad. 

La mujer, en estado de gestación, también es más propensa a padecer una contractura lumbar debido a la propia postura del embarazo.

  • Inactividad física y sedentarismo

La inactividad  física provoca debilitamiento muscular que va a potenciar el peligro de sufrir una contractura lumbar y la aparición de dolor.

Estar demasiado tiempo sentado y en una posición incorrecta hará que nuestro centro de gravedad sufra, afectando más directamente a la zona lumbar.

La edad, lógicamente, aporta otros riesgos añadidos a la hora de sufrir una contractura lumbar; bien sea por la existencia de patologías, como la artrosis, o por la pérdida natural de masa muscular y a la fragilidad ósea.

  • Hábitos alimenticios

El abandono de una dieta equilibrada y la deshidratación pueden también originar una contractura lumbar, ya que el cuerpo no recibe el aporte necesario de minerales y nutrientes que mantiene en buen estado la fibra muscular.

  • Factores patológicos

Sufrir alguna de las siguientes patologías puede generar también la contractura lumbar:

  • Escoliosis
  • Ciática
  • Osteoporosis
  • Hernia discal
  • Traumatismos bruscos
  • Factores psicológicos

Asimismo, tanto la ansiedad, la depresión o el estrés constituyen riesgos añadidos de poder sufrir una contractura lumbar involuntaria, ya que estos factores hacen que nuestro cuerpo padezca la rigidez muscular que la origina.

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Los síntomas de una contractura lumbar

Podríamos establecer la siguiente relación:

  • El dolor en la zona lumbar constituye, sin lugar a dudas, el síntoma más generalizado.
    • Es normal que aparezca en las 24 horas siguientes de haber sufrido la lesión lumbar.
    • Se trata de un dolor difícil de localizar con precisión, ya que se propaga hacia ambos lados de las vértebras y puede irradiarse hacia el glúteo, ingle y cadera.
    • El esfuerzo intensifica el dolor pero el reposo llega a ser, incluso, más perjudicial; por lo que es recomendable realizar una actividad suave y controlada.
  • Alteración del movimiento. La debilidad muscular puede suponer la ausencia parcial (paresia) o total de movimientos (parálisis):
    • Imposibilidad de flexionar y estirar hacia atrás el tronco, por lo que movimientos tan simples como agacharse pueden resultar imposibles.
    • Dificultad para caminar.
  • Alteración de la sensibilidad 
    • Adormecimiento de piernas y pies por disminución de la sensibilidad (hipoestesia)
    • Dolor al contacto en la zona afectada por aumento de la sensibilidad (hiperestesia)
    • Hormigueo y punzadas

Tratamientos de la contractura lumbar

Una contractura lumbar puede tratarse de diversas maneras.

  • Mantener un reposo relativo; es decir, la contractura no mejora guardando cama, incluso puede resultar hasta perjudicial.
  • Mantener una actividad física mínima.

Con estas dos medidas de fondo, el tratamiento será más efectivo.

  • Un tratamiento doméstico tradicional consiste en:
    • Administrar frío o calor. El frío debe aplicarse exclusivamente tras la lesión y el calor cuando los síntomas de dolor se recrudecen. Esto hará que se active el flujo sanguíneo y se alivie la tensión nerviosa, provocando la relajación muscular.
    • Uso de fajas lumbares para dar compresión a la zona en determinados momentos.
  • Un tratamiento farmacológico incluirá:
    • Analgésicos para dolores leves
    • Antiinflamatorios
    • Relajantes musculares

El tratamiento fisioterapéutico es el que mejor respuesta da a la recuperación de una contractura lumbar. Con la fisioterapia se relajará la musculatura incidiendo sobre el sistema nervioso y se motivarán los movimientos a través de la corrección de posturas.

Tratamiento de fisioterapia para la contractura lumbar

Con la fisioterapia no sólo se busca la recuperación sino también disminuir el riesgo de recaídas.

En Wellblein, tu clínica de fisioterapia en Madrid, aparte del lógico análisis previo que realizamos, procedemos con las siguientes técnicas: 

  • Recuperación:
    • Masoterapia
    • Punción seca
    • Diatermia
    • Osteopatía estructural
    • Estiramientos
  • Reeducación:
    • Control postural. Corrección de las posturas inadecuadas que han inducido la contractura. Para ello, se trabajan movimientos que modifiquen los hábitos del paciente de cara a evitar recaídas. De esta manera, se muestran las posturas adecuadas de agacharse para cargar o recoger peso, sentarse o levantarse y, en definitiva, todas las medidas de higiene ergonómica necesarias.
    • Ejercicios preventivos. Se diseña una tabla personalizada de ejercicios de fortalecimiento con el objetivo de recobrar la tonificación de la musculatura así como su relajación.

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Si necesitas saber más sobre éste o cualquier otro tema no dudes en  contactar con nosotros.

Desde Wellblein, tu clínica de fisioterapia en Madrid esperamos que esta información te haya sido útil, al mismo tiempo que te invitamos a visitar nuestras instalaciones y conocer también nuestros servicios de Yoga y Pilates.

¡ No te pares ante una contractura lumbar, camina !

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